La crisis financiera por la que atraviesa el holding del grupo Saieh, SMU, seguiría trayendo coletazos. Es que, según fuentes cercanas al retailer, los problemas para pagar a sus distintos proveedores se mantendrían.

En esa línea, las empresas constructoras que edificaron y remodelaron una serie de salas de venta supermercados Unimarc en la zona sur del país estarían complicadas, porque no se les habría pagado lo comprometido por sus obras. Esto, tomando en cuenta que en su mayoría son Pymes

Cabe recordar que hace algún tiempo, la Asociación Gremial de Industrias Proveedoras acusó de manera pública que sus empresas asociadas enfrentaban problemas con el pago de facturas por parte de la compañía. De hecho, este gremio presentó ante la Fiscalía Nacional Económica una denuncia por abuso de posición dominante de SMU, en esa ocasión.

Incluso, a causa de esta situación, se creó en el gobierno anterior una mesa de trabajo entre las cadenas de supermercados y sus proveedores que en todo caso terminó sin conclusiones de relevancia para las pymes, que alegaban impagos y atrasos en las cancelaciones por sus servicios.

ACREEDORES

En otro tema relacionada, ayer habrían finalizado las negociaciones del conglomerado con sus acreedores. Trascendió que eventualmente, las 12 entidades financieras habían decidido aceptar que la cadena del grupo Saieh pagara al menos un 50% de lo convenido inicialmente, lo que representaría un–os US$ 35 millones. y que la otra mitad fuera cancelada en los siguientes meses.

El capital habría provenido del controlador de SMU, Álvaro Saieh, quien compraría la suda y así pasaría a ser acreedor del holding. En todo caso, ayer las negociaciones se habrían enfocado en qué porcentaje se volvería a prorrogar. Una de las cosas que más preocupa a los acreedores, sobre todo al Bice –que ha sido la entidad financiera más dura en su posición, y que anteriormente no quiso prorrogar el pago de su cuota por unos US$3 millones– es que en los próximos meses SMU presenta otros vencimientos de deuda que se acumularían con los pagos a los que en este momento se estaría otorgando más plazo.

A todo eso, se suma que no hay muchas esperanzas en que el grupo Saieh –que no tendría la suficiente liquidez– se desprenda del 40% de Montserrat, ni tampoco que sea muy sencillo que enajene su filial ferretera Construmart, dado que el controlador de SMU no estaría dispuesto a ceder valor de estas inversiones, en vista de que las ofertas –sobre todo por esta última firma– han estado bastante bajo sus expectativas.

Fuente : Estrategia