Recomiendan que ley de gobiernos corporativos imponga requisitos mínimos para directores
El académico experto en derecho comercial de la Universidad de los Andes, Eduardo Jaquier, identificó los principales cambios que se debieran implementar en la ley de gobiernos corporativos tras el escándalo de La Polar.
Considera un error que las multas estén estandarizadas con montos de hasta 15.000 UF y un tope máximo –en casos de reincidencia–de hasta tres veces este valor. Plantea que las multas podrían ir en relación con el perjuicio causado al mercado y en relación al beneficio obtenido, tal como ocurre en países como EEUU, donde la SEC tiene mayores atribuciones en ese ámbito. El académico de la facultad de Derecho de la Universidad Adolfo Ibáñez, Osvaldo Lagos, plantea respecto a las multas anunciadas por la SVS que es difícil comparar con otros países, pues en Estados Unidos, por ejemplo, la determinación de su cuantía depende de la gravedad del hecho y la capacidad económica del infractor, entre otros criterios.
Puede ocurrir que en otras jurisdicciones las multas sean más altas respecto a su cuantía, pero que resulten proporcionalmente menores respecto del daño al mercado de valores y a lo obtenido por los infractores.
Por otro lado, «debe tenerse presente que las multas están sujetas aun interés penal considerable (1,5% mensual sobre el valor reajustado), lo que si se combina con lo largo que puede resultar el procedimiento de reclamo, puede incidir en un importante aumento de la cuantía», agregó.
Para el experto, la diferencia fundamental se encuentra en la eficacia de los mecanismos para hacer efectivas las sanciones. La novedad del caso La Polar es la persecución penal de estas conductas, situación inusual en Chile, pero no en otros países. Eduardo Jaquier plantea además que requisitos mínimos para la elección de los directores y que éstos atiendan al giro y función de la compañía. «No quiere decir que los directivos sean expertos en cierta materia», dijo.
Y agregó: «Se ha sostenido que el directorio de La Polar era un directorio compuesto de gente muy capaz, pero al que le faltaban ciertas piezas claves. Más que retail, el negocio de La Polar terminó siendo un negocio netamente financiero, y entonces lo que se requería era complementar el equipo con expertos en finanzas. En consecuencia, lo importante es construir un buen equipo».
Fuente : Pulso