Pagar una compra en 15 segundos tan sólo mostrando un código en la pantalla del celular. Así es como se resume, a grandes rasgos, la experiencia de KPay, de la empresa española Kuapay, un sistema de pago a través del celular que actualmente funciona en España y EE.UU. y que ahora realiza su primer piloto a gran escala en Chile.

Joaquín Ayuso, su actual CEO, fue cofundador de la red social Tuenti, la más grande en España y que luego fue vendida a Telefónica. Parte de ese dinero lo invirtió en crear este sistema que permite convertir cualquier teléfono inteligente en una billetera electrónica.

El sistema –que usa códigos QR– inició esta semana un piloto que incorporará a 200 locales del barrio Lastarria, Italia y Drugstore y que busca que unos dos mil clientes lo usen durante dos meses.

Tarjetas al bolsillo

La experiencia de pago con celulares se remonta a finales de los 90, cuando comenzaron a surgir los primeros servicios de pago a través de SMS o por medio del chip del celular, sistemas que incluso llegaron a Chile permitiendo comprar bebidas en expendedores. Pero no siempre funcionaba, por lo que no prosperó.

Hoy, según cifras de Gartner, las transacciones móviles de cualquier tipo asciende a 235 mil millones de dólares en todo el mundo, menos de lo esperado.

A la fecha, en nuestro país se han realizado varios pilotos con diversos sistemas, pero ninguno a gran escala. Transportes anunció la implementación de un piloto con este sistema para pagar Transantiago este año. Era a través del sistema de NFC, donde el celular tiene incorporado un chip, pero hasta ahora no hay novedades. Quien sí está realizando un piloto con ese sistema (NFC) es Telefónica junto al Banco Santander.

Seguridad

KPay usa un sistema de códigos QR para realizar y validar las compras. Para funcionar, el usuario debe bajar la aplicación gratuita para iOS o Android, crear una cuenta e ingresar los datos de su tarjeta de crédito. Cualquier banco sirve dado que el sistema tiene convenio con Transbank. Luego, para pagar, el usuario sólo debe mostrar al vendedor un código generado en la pantalla del celular. El vendedor lo captura con la cámara del celular de la tienda habilitado y la transferencia se realiza en no más de 15 segundos.

Unos de los pilares fundamentales del sistema es la seguridad. De hecho, les tomó dos años completar todos los requerimientos de Transbank.

El código transmitido por los celulares no tiene ningún dato personal, sólo un número que va cambiando y que identifica al usuario dentro del servidor de Kuapay. En caso de robo la persona no tiene que bloquear la tarjeta, sólo debe darla de baja en kpay.cl por internet.

Si la experiencia es exitosa, realizarán otro piloto aún mayor. El objetivo es que se vuelva masivo en 2014.

Fuente : La Tercera