Las ventajas del sistema para usuarios y empresas
La irrupción de la factura electrónica y su obligatoriedad en Chile ha traído una gran cantidad de cambios al clásico sistema en papel y con efectos en el proceso de facturación. Los expertos en el tema coinciden en que esta innovación era natural y predecible producto de los cambios que han originado las tecnologías de la información a la sociedad en su conjunto.
Según George Lever, gerente de Estudios y director del Centro de la Economía Digital de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), es un gran paso de modernidad para las empresas el tránsito de la factura de papel al formato electrónico. «El sistema tradicional funciona sin mayores problemas, pero pertenece a una época centrada en el papel que está siendo reemplazada en todos los ámbitos de nuestra sociedad y vida, y la facturación no puede ser una excepción», dice Lever.
Existen diferencias relevantes entre ambos sistemas, por ejemplo, el sistema de foliación de documentos, en el caso de la factura en papel, incluye los números de folio preimpresos, donde cada hoja es irreemplazable. Además, las hojas foliadas deben ser timbradas físicamente para ser documento tributario. «En el caso de la factura electrónica, todo es online. Lo mismo el almacenamiento de los documentos físicos que exige la ley para eventuales revisiones futuras. En la factura online, cada vez que se emite un documento tributario, queda almacenado automáticamente en forma electrónica», detalla George Lever.
A juicio del especialista de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), son diversos los beneficios que se generarán con este cambio, entre ellos: la eliminación del riesgo de pérdida o falsificación de documentos. Un ahorro por costo de impresión, tiempos de despacho y entrega de los documentos tributarios. Además de una reducción del espacio físico, ya que la información puede ser almacenada de forma digital, sin necesidad de tener archivadores y bodegas. Otra ventaja es que desaparece la necesidad de realizar el trámite de timbraje físico de los documentos tributarios ante el Servicio de Impuestos Internos (SII).
Maclovio Moenne–Loccoz, vicepresidente de Administración y Asuntos Gremiales del Colegio de Contadores de Chile, dice que los atributos del nuevo sistema son amplios: «La facturación electrónica es automática, a diferencia del anterior sistema». Otros beneficios son la simplicidad, economía en el proceso de timbraje, la descongestión de las oficinas (ahorro de tiempo), y una mayor seguridad y control en la operación. «Evita que se usen timbres o facturas falsas con la misma numeración, todo tipo de falsificaciones», complementa. Para Moenne–Loccoz, una de las utilidades de la factura electrónica es que garantiza que haya menos errores, en contraste con la factura hecha en papel. «Si anotas el RUT de manera manual, era común equivocarse. En cambio, por computador hay un sistema validador que detecta más rápido este tipo de errores», ejemplifica.
El servicio también dispone otra facilidad: ofrece de forma gratuita los software de factura electrónica para aquellos contribuyentes que no tengan ingresos superiores a 500 millones en 12 meses consecutivos. «El único impedimento es si la persona ha sido procesada, condenada o está siendo revisada por delitos tributarios», especifica el dirigente gremial.
Fuente : La Tercera