La inflación de 0,3% de agosto no dejó indiferentes a los analistas del mercado, que ven con preocupación los efectos que pueda causar el retroceso del peso frente al dólar y los efectos estacionales sobre el IPC para fines de año.

Con la cifra dada a conocer hoy, las proyecciones para el costo de la vida se elevaron hasta 4,4%, el que sería su mayor índice desde el 2011, superando el 3,8% estimado en la última Encuesta de Expectativas Económicas del Banco Central.

De este modo, los precios del año se situarían por encima del rango meta del Banco Central de 3% más o menos un punto porcentual.

Para Antonio Moncado, economista de BCI Estudios, con el IPC de agosto vuelve a surgir la incomodidad por el efecto del tipo de cambio, dado que los principales efectos del alza estuvieron asociados a la depreciación del peso, especialmente en productos importados, como vestuario y autos nuevos.

Desde Santander, afirman que pese al preocupante avance de la inflación subyacente, las mayores alzas registradas en agosto se debieron a factores coyunturales, como la paridad cambiaria.

«Parte importante del ajuste al alza de las expectativas que teníamos para el IPC está asociada a la depreciación del peso, un grupo importante de alimentos se ha estado ajustando en línea con el aumento del tipo de cambio», señala Felipe Bravo, economista de Santander, donde proyectan una inflación de 0,5% para septiembre y de 4,3% para fin de año.

Visión similar tiene el economista jefe de Banco Penta, Matías Madrid. «La reciente depreciación del peso ya se está traspasando a las cifras de IPC. Sin embargo, estimamos que el impacto en esta ocasión será menor a lo observado a principios de año, porque las holguras de capacidad que existen hoy en la economía son bastante mayores», afirma.

EuroAmerica también coincide en el diagnóstico respecto al efecto del peso. «El IPC de agosto refleja traspasos de tipo de cambio a precios relativamente significativos, lo que se refleja en un importante avance de 0,4% en los bienes transables». De este modo, las expectativas inflacionarias de esta corredora se elevaron desde 3,8% hasta 4,1%. Para septiembre, espera una inflación de entre 0,6% y 0,7%.

TPM: mantiene o baja 25 pts
Para la Reunión de Política Monetaria del jueves existe mayor consenso entre los analistas, que esperan que el Banco Central mantenga la tasa referencial de la economía o la recorte en 25 puntos base, viendo poco probable una reducción más agresiva.

«Si bien la inflación sorprendió al alza, proyectamos que el Banco Central disminuiría en 25 pb las tasas, dado el bajo crecimiento de julio y el discurso expansivo», dice CredicorpCapital.

Mientras que BBVA estima que, dada la sorpresa inflacionaria, no ven espacio para un recorte más agresivo que 25 pb, lo que dejaría la TPM en 3,25%.

Fuente : La Segunda