EL sueño de todo consumidor Econsciente es que cada vez que realiza una compra pudiese aparecer en su boleta información relacionada con los índices de sustentabilidad del producto que eligió, como por ejemplo, su huella de carbono, huella hídrica; si el proceso de producción fue eficientemente energético; si el sistema de elaboración con los productores se basó en comercio justo, si generó impactos ambientales. Se trata de desafíos que la industria, frente a clientes o compradores cada vez más sensibles al tema, debe comenzar a incorporar, amén de la internacionalización de los mercados que está imponiendo con más fuerza estos criterios. Pero hoy no hay posibilidad de elegir un producto bajo estas consideraciones. Para avanzar en ese camino y promover una práctica sustentable en la industria, es que se instituyó en Chile el Consorcio por la Sustentabilidad, a fin de proveer de una plataforma que permita facilitar la medición y reporte de sustentabilidad de manera estándar en los productos, y a partir de allí generar el primer índice de Sustentabilidad en el país. El Consorcio de la Sustentabilidad en Chile depende del organismo homónimo en Estados Unidos, creado por Walmart en el 2009, justamente para medir las operaciones de sus más de 100 mil proveedores.

En el país, el Consorcio funciona desde 2012 bajo la secretaría ejecutiva de Fundación Chile, entidad que hoy ya dirige un programa de estudio del ciclo de vida de más de 20 empresas.

Para evitar el green washing o marketing verde, el Consorcio americano de Walmart se organizó con más de 100 compañías, universidades, ONG y organismos de gobierno. «Es una organización autónoma que trabaja en cómo acercar el mundo de la ciencia a los negocios, para que pueda comunicar de manera transparente, completa y útil al consumidor sobre qué productos son los más sustentables», comenta Marina Hermosilla, gerente de Sustentabilidad de Walmart Chile.

En nuestro país participan además organismos gubernamentales como ProChile y el Consejo de Producción Limpia, además de la Universidad Andrés Bello y la ONG de conservación internacional WWF.

Desde el punto de vista metodológico la plataforma incluye una base de datos para medir y reportar el ciclo de vida de los productos. También considera manuales y uso de herramientas tipo calculadora para que las empresas puedan registrar de manera independiente su desempeño de sustentabilidad. Cristián Emhart, director de sustentabilidad de productos del área de Energía y Cambio Climático de Fundación Chile, explica cómo funciona el modelo: «se trata de hacer por cada categoría de producto una ficha o sistema de métricas de sustentabilidad; se evalúa el ciclo de vida, se identifican las oportunidades de mejoras e indicadores de gestión de los procesos críticos. Se analizan además los impactos sociales, ambientales, de energía, huella de carbono, agua y calidad de los ecosistemas entre otros. Para cada uno de estos procesos o hotspots se establecen diferentes niveles de gestión y se otorga puntuación».

Explican que a la fecha, ya hay cambios importantes, como productores que han reducido su consumo de agua y energía y que han incorporado mejores prácticas, por ejemplo de inocuidad alimentaria o en la relación con sus trabajadores. Todo ello se traduce en eficiencia en la cadena de producción y en el uso de los recursos.

Así las cosas, el 2014 Chile contará con su primer índice Sustentable de productos, lo que sin duda impactará positivamente en el mercado y en la percepción de aquellos consumidores que quieren elegir con conciencia qué producto comprar pensando en el futuro del planeta.

Fuente : Pulso