SVS suspende acción hasta el viernes tras recibir información insuficiente de la compañía
Ya lo había advertido el superintendente de Valores y Seguros (SVS), Fernando Coloma, ayer en la mañana: «Cuando llegue el hecho esencial, veremos los pasos a seguir respecto de las transacciones de La Polar. Si la información es suficiente, se va a seguir transando; si no es así, se mantendrá suspendida hasta tener más información».
Y así fue. La SVS informó anoche su decisión de mantener suspendida «la oferta pública, cotización y transacciones de todos los valores de La Polar» hasta las 24 horas del próximo viernes. Esto, porque consideró insuficientes los antecedentes que la empresa entregó, a las 16.02 horas de ayer, en un hecho esencial. En esa comunicación oficial detalló las medidas que está tomando, tras informar la semana pasada que deberá realizar provisiones por hasta casi US$ 430 millones, producto de prácticas no autorizadas por el directorio en el negocio del crédito.
En un comunicado de prensa, la SVS señaló que «aún no se dispone de información lo suficientemente precisa respecto de algunos aspectos planteados por la sociedad».
El jueves, el regulador pidió a la compañía que informara cómo esta situación afectará sus resultados. La firma se comprometió a responder, a más tardar, a las 09.00 de ayer.
El mercado inició la semana esperando esos antecedentes, pero la respuesta no llegó. La alta dirección de la firma optó por ir a la SVS a informarle a Coloma las medidas adoptadas por el directorio. Tras esa reunión, el presidente de La Polar, Heriberto Urzúa, dijo que buscan una solución para los clientes y, consultado sobre si la responsabilidad del problema es sólo de un gerente, señaló que «nosotros pensamos que no»
A las 10.54, y cuando los títulos caían 10,83%, la SVS suspendió las transacciones. Casi cinco horas más tarde, La Polar informó que había definido seis acciones. Estas medidas, sin embargo, no tranquilizaron al mercado. «Lo que informa el hecho esencial es preocupante, porque profundiza los peores escenarios posibles», dijo Claudio González, de Tanner.
El anuncio que concitó las mayores dudas fue el plazo de hasta tres meses que tardará una revisión de la cartera de clientes que realizará Deloitte. Concluida esa etapa, recién la firma determinará las provisiones requeridas y los períodos afectados y, luego, informará cómo se contabilizarán esos efectos. Para los expertos, el plazo es excesivo y genera más incertidumbre. «En este hecho esencial, básicamente se dan tres meses más de dudas», asegura Francisco Errandonea, del Santander GBM.
«Es bastante amplio (el período), pensando que debería haber un escenario un poco más claro pronto», complementa González, con relación al aumento de capital que tiene pronosticado votar la compañía el 22 de junio.
Según el analista, dadas la incertidumbre que generan estos tres meses y la falta de información, «lo más probable es que no entre un socio estratégico». Bárbara Angerstein, de Celfin, estima que la información puede no ser del todo suficiente para los accionistas, «como para decir ‘vamos a ponernos con US$ 400 millones’ sin tener claridad».
La firma también contrató al abogado Davor Harasic para que ejerza acciones penales y civiles «en contra de quienes resulten responsables», y pidió la renuncia de la gerenta corporativa de Administración, María Isabel Farah. Esta salida se suma a la ya anunciada del gerente de productos financieros, Julián Moreno.
El caso de La Polar no ha sido el único donde la SVS ha suspendido la acción por períodos prolongados. En 2005, los papeles de Schwager estuvieron un mes sin transarse.
La operación
Según la firma, las tiendas seguirán funcionando con normalidad. Además, harán una nueva oferta a los clientes, a quienes les extendió los plazos de pago, en respuesta a las repactaciones unilaterales de las deudas.
Ayer en las tiendas, vendedores explicaron que siguen las políticas de entrega de avances en efectivo, tarjetas y créditos. Sí fueron instruidos la semana pasada de la entrada en vigencia de un nuevo contrato, que estipula que para que una repactación se lleve a cabo debe contar con la firma del cliente.
Fuente : La Tercera