Bajo la premisa que el agua es fundamental para la seguridad alimentaria, desde 2001 Nestlé, a nivel mundial, trabaja en una estrategia de reducción del consumo hídrico. El objetivo es ambicioso: disminuir en un 25% la extracción del recurso en sus procesos entre 2011 y 2020.

En Chile, la multinacional de origen suizo, estableció su propia meta: reducir el consumo por sobre un 4% anual, en las siete plantas que posee en nuestro país.

Pedro Ramírez, gerente de Ingeniería de Nestlé Chile, expresa que en el período 2011– 2014 la firma disminuyó su consumo de agua en un 22%, por lo que esperan alcanzar la meta fijada para 2020 durante este año.

Desde que se inició el plan a nivel internacional, Nestlé Chile ha logrado reducir en un 73% su consumo, pasando de 25.5 m3 de agua por tonelada de producto en 2001, a 6.89 m3/ton a 2014. «Para cumplir este objetivo, se implementan al menos dos proyectos en cada planta por año. Asimismo, contamos con el Water Target Setting, cuyo objetivo es evaluar iniciativas de reducción de uso de agua para establecer planes de acción», señala el ejecutivo.

Entre los proyectos que la firma ha puesto en marcha en las fábricas en Chile, se cuenta el uso del agua que se evapora de la leche en procesos como alimentación de agua de caldera o el lavado de camiones; la recuperación del agua del sello de bombas para reutilizarla en torres de enfriamiento; instalación de sistemas temporizados con sensores en todos los grifos; reutilización del rechazo del agua de plantas de osmosis en riego, y una campaña de cuidado del recurso para los colaboradores a través de capacitaciones e–learning, entre otros.

Programas sustentables

En 2013, Nestlé Chile se sumó al proyecto SuizAgua – desarrollado por el gobierno suizo a través de su Agencia Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) e implementado por Fundación Chile – que busca medir y reducir la huella hídrica de las empresas y la ejecución de planes orientados a la comunidad. En este contexto, junto con realizar mejoras en la planta láctea de Llanquihue, se desarrolló «Aquamigos» un programa educativo para estudiantes de 5° y 6° básico de la comuna.

Fuente : El Diario Financiero