LarrainVial ve gradualidad y exigencias a las PYME como principales trabas del proyecto
Un acucioso análisis realizó LarrainVial al proyecto de reforma laboral, el cual a su juicio estuvo «más o menos en línea» con las expectativas, a excepción de las medidas diferenciadas para las pequeñas y medianas empresas (PYME), que finalmente fueron dejadas fuera por el gobierno. Con todo, afirmó que los cambios que busca la reforma «son significativos».
En esa línea, el Departamento de Estudios prevé que la discusión tomará algún tiempo en el Parlamento, sobre todo teniendo en cuenta que «algunos miembros del Congreso creen que en el proyecto de ley todavía faltan ciertas medidas relacionadas a mejorar las condiciones laborales y la acumulación de capital humano».
La comisión de Trabajo de la Cámara Baja inició ayer por la tarde el debate del proyecto, y se espera que éste se extienda durante todo el primer semestre del año.
Para LarrainVial, la duración de la discusión es relevante, sobre todo considerando la «aguda» desaceleración que afecta a la economía local y que se ve mucho más persistente de lo que se esperaba meses atrás.
Sostiene que el menor crecimiento de la actividad ha impactado de manera negativa en las condiciones del mercado laboral, desacelerando los salarios y la creación de empleo, así como deteriorando la calidad de los mismos.
«Bajo nuestro punto de vista, los mayores problemas probablemente incluirán cómo implementar los cambios de manera gradual y la definición de los requerimientos menos demandantes para las PYME», indicó la entidad en un informe enviado a clientes.
Las dudas que plantea el proyecto
Al igual que otros bancos de inversión como JPMorgan, BTG Pactual y Santander GBM, LarrainVial cree que los cambios en el plan laboral chileno presionarán los costos laborales de las empresas locales.
La entidad hizo hincapié en que debe tenerse en cuenta que la densidad actual de los sindicatos alcanza a 14% de los trabajadores y mientras el 50% de las grandes empresas tiene sindicatos, apenas el 5% de las pequeñas compañías cuentan con trabajadores sindicalizados.
¿La importancia de este punto? LarrainVial cree que cerrar esta brecha –comparado con otros países de la región y en el resto del mundo–, creará una presión significativa en los costos laborales y generará una mayor incertidumbre operacional para las compañías locales en el mediano plazo.
Así, estima que sectores como retail, aerolíneas y comidas y bebestibles podrían terminar siendo las más afectadas de incluirse los cambios en el esquema laboral propuestos en la reforma.
Respecto a los puntos particulares del proyecto, la entidad resaltó que la definición de servicios mínimos o faenas es «bastante limitada» y tiene por objetivo evitar un daño irreparable a la infraestructura de las compañías, el ambiente, o condiciones de salud de los pacientes, en el caso del sistema de salud.
«Además, con la reforma laboral, la base mínima para los futuros procesos de negociación colectiva será de acuerdo a los sueldos y beneficios obtenidos durante el proceso anterior. En ausencia de un acuerdo previo, la base será acordada por el empleador, pero no podrá ser fijada bajo la norma actual de los trabajadores sindicalizados», resaltó.
La agenda laboral es uno de los puntos neurálgicos del programa del actual gobierno y busca abordar los procesos de negociación colectiva, equilibrio de poder entre las empresas y los empleados y la adhesión sindical, «todo ello en línea con las promesas de campaña de la presidenta Michelle Bachelet».
Fuente : El Diario Financiero