Respecto a las ventas por Internet se han establecidos varios hechos: en el Reino Unido es donde más se gasta comprando desde el computador, incluso más que en Estados Unidos. Entre las economías emergentes, la líder es China con casi 37 billones de dólares en ventas online durante 2009. Y las áreas de crecimiento más significativo son los libros y los viajes.
En Chile somos principiantes, pero a simple vista y a través de la experiencia de varios emprendedores, podemos aportar diciendo que el diseño y la decoración están ganando terreno importante en este tipo de comercio.
www.buscalibros.cl comenzó evidentemente como una librería online que, trayendo volúmenes imposibles de encontrar en Chile, creció rápidamente hasta convertirse en la más importante de Sudamérica. Hace más de un año ampliaron su catálogo a todo tipo de productos y abrieron oficinas en México, Colombia, Argentina y España. En ese momento fue necesario cambiar de nombre y de dominio. Ahora son www.buscalibre.com, una tienda retail on demand que busca lo que requieran sus clientes en cualquier lugar del mundo. Y un 30 por ciento de lo que sus clientes requieren no son libros, y de esa cantidad, entre el 30 y el 50 por ciento son objetos que involucran diseño, desde relojes hasta accesorios de cocina. Karen Pincus, Sugerente de marketing, explica que con relación al año anterior, las ventas durante 2012 se triplicaron y esperan resultados similares para 2013.
Para Nicolás Valenzuela, arquitecto, dueño de la tienda www.depto51.cl –junto a su mujer Magdalena Maino, directora audiovisual–, hay una similitud clave entre los libros y el diseño que puede explicar el crecimiento de ese mercado: detrás de ambos hay siempre un autor.
–Con el diseño puede pasar que a veces necesites tocar algunas cosas para poder apreciarlas, pero los productos que nosotros trabajamos tienen un concepto de marca detrás que da confianza. Nuestro trabajo finalmente es una curatoría en la que interviene el sentido común. Uno se da cuenta cuál es la gente que está haciendo bien las cosas –explica Nicolás.
Desde que comenzó como un blog de diseño donde publicaban objetos que querían para su casa de recién casados, Depto51 se ha convertido en una comunidad de diseño, básicamente por el feedback que recibieron, porque la gente quería saber dónde comprar cosas como las que mostraban. Empezaron estableciendo contacto con marcas de Suecia y Dinamarca, porque les gustaba el diseño escandinavo. El criterio era todo lo que estaba entre medio de la oferta muy muy cara y la muy muy barata que había en Chile. Abrieron la tienda online porque sin costos fijos podían ofrecer precios más competitivos, en septiembre de 2011, y pronto agregaron a su catálogo marcas chilenas que no tenían un canal de ventas online, como The Andes House, Si Studio, Minka, entre otras. También están formando alianzas con Olika y Cómodo, y durante 2013 esperan consolidarse en Chile y replicar el modelo en otros países de Sudamérica:
–Eso te permite Internet, la gente accede desde cualquier parte y con la logística adecuada puedes satisfacer esa demanda. El e–commerce ha crecido mucho en la región. Aún existe cierta desconfianza pero si generas un buen concepto de marca la gente se atreve. Intentamos humanizar el proceso, siempre respondiendo amablemente todos los mails. La gente necesita sentir que trata con una persona.
Depto51 tiene a su público objetivo perfectamente identificado: se trata de mujeres entre los 24 y los 35 años. Cuentan que los hombres escriben también, pero son las mujeres las que finalmente toman la decisión de compra. Danae Oyarzún, diseñadora y dueña de www.amonona.cl, concuerda en que el grueso de la clientela son mujeres, aunque tratan de tener productos para todas las edades y géneros. Ella también partió este emprendimiento con su marido, el ingeniero Matthieu Marie, hace dos años. También comenzaron buscando cosas para su propia casa. Así llegaron a los sitios que venden diseño en Europa y EE.UU., que les sirvieron como referentes. Considerando la oferta escasa que había en nuestro país y la tendencia a comprar con tarjeta, se entusiasmaron con el proyecto aunque le parecía riesgoso.
Empezaron con pocos productos y un sitio muy básico, fueron creciendo y tuvieron una tienda física en Vitacura. Pero desde Viña del Mar, donde viven, fue imposible tener un buen control de ella. Sólo con la tienda online se han consolidado hasta tener exclusividad con marcas de Tailandia, Alemania y Dinamarca, entre otros países, las que ellos venden directamente a sus clientes y además distribuyen a tiendas físicas en Santiago.
–Todos nuestros productos son originales, no son copias. Es un tema muy complicado en Chile. A la gente no le interesa tener el producto original, quiere el más barato –explica Danae.
Mariangela Capurro, una de las tres socias de la www.tiendalaguinda.cl, opina que la gente está más «suelta» a la hora de comprar por Internet, y entiende que no necesita ver ni tocar todo físicamente. Ella, junto a Alejandra Plaza de los Reyes y Macarena Browne, todas compañeras de Diseño en la UC, comenzaron con accesorios como joyas fabricados por ellas, pero siempre les gustó la decoración y el año pasado se atrevieron a emprender.
A estas mujeres que ya formaron familias, Internet les da la oportunidad de trabajar desde sus casas y en horarios flexibles que les permiten ocuparse de sus hijos pequeños. Cosas que empleadas en una agencia serían muy difíciles de lograr.
–Fue necesaria una inversión inicial, pero era razonable. Tenemos la ventaja de que podemos publicar la foto del producto y mandarlo a hacer cuando lo solicita el cliente. No necesitamos tener todo en stock permanentemente –dice Mariangela.
Ella coincide en que la mayoría de los compradores son mujeres. La edad, para ella, comienza en el momento en que empiezan a ser invitadas a matrimonios, alrededor de los 20 años. Por sobre los 50 ella nota interés, pero más dificultades para emplear las herramientas. Esos clientes, muchas veces, prefieren entregar un cheque en vez de hacer una transferencia.

Fuente : El Mercurio